Pedro Aranda Astudillo:
HUMANIZAR PARA
TRANSFORMAR
PREÁMBULO INFORMATIVO:
Dos
connotados investigadores de la Universidad del Desarrollo, Marcel Oppliger y
Eugenio Guzmán, autodefinidos como adherentes al sistema de libre mercado,
publicaron el libro, “El Malestar de
Chile” en mayo 2012. Su titular refleja que insoslayablemente también respiran
tal malestar: colusiones, abusos, y una alterada convivencia social. De sus análisis concluyen que “el éxito del
modelo ha complejizado y diversificado nuestra vida en común”. Proponen: “Se
necesitan modificaciones sustantivas en las reglas básicas de nuestra
convivencia, en cómo elegimos las autoridades y que establezcan nuestras
responsabilidades como ciudadanos”.
Sólo
dejo establecido que tales autoridades intelectuales evidencian un malestar que
recorre chile.
Desde
hace más diez años vengo sondeando en cursos, talleres en los más diversos niveles y diversidad de personas, y sin orientaciones previas: “cómo ve ud el
mundo, su mundo, cómo lo siente”. A continuación presento el abanico de
percepciones cuya contundencia y convergencias apuntan a un vértice que nos
resulta más congruente entre sus síntomas y sus causas. Por lo demás, cuando cabe penetrar las
profundidades, lo cualitativo, son las evidencias que desnudan y desanudan los
problemas, más que las estadísticas y los datos duros. Los transtornos
sociales desafían a las gobernanzas que
si bien
necesitamos comprar arroz para vivir, también
tener flores nos da un sentido para vivir. Como decía la milenaria sabiduría china.
“HOY, ES SIEMPRE TODAVÍA”
Nuestra Propuesta:
HUMANIZAR
PARA TRANSFORMAR
¿C Ó M O?
Reconociendo cómo vivimos,
Dialogando por lo que somos,
Tejiendo
voluntades por lo que amamos.
Reconociendo
cómo vivimos,
Dialogando por lo que somos,
Tejiendo voluntades por lo que amamos.
CONTEXTO SOCIO
ECONÓMICO CULTURAL QUE NOS INVADE:
El
Poder Económico, El Poder Científico – Tecnológico nos sobrepasa y nos domina a
todos. Estos poderes dinamizadores de desarrollo nos encandilan y nos
arrollan. El poder del consumo nos
consume, tanto tienes – tanto vales.(El 60% de los hogares adeuda sobre sus
ingresos. INE-2012). Las ansiedades son más insaciables, las metas
productivas siempre llamando a otras superiores. El rendimiento por
resultados
es ley que bordea “el fin justifica los medios”. Los
resultados
deben ser eficientes “siempre más, al menor costo y al menor tiempo”.
Se
instaura la “comida rápida”. La prisa ya es una epidemia mundial. La saturación
por tal estilo de vida convierte los espacios de descansos en evasiones, adicciones.
Sin embargo, según un estudio realizado por el diario La Tercera (Tendencias,
21 de stbre 2013) se advierte “que hasta perdimos la capacidad de saber qué tan
cansados, agobiados estamos”. El mundo interior personal queda eclipsado. La
depresión es la causa más relevante de las licencias en las Isapres. Informe de Salud Octubre 2016. No en vano
Chile está entre los primeros países con la mayor tasa de suicidios.
“De
los 36 Países de la OCDE, Chile se ubica en el 34 lugar: renta per cápita,
vivienda, seguridad, educación, medio ambiente, salud, comunidad, trabajo v/s
vida familiar” (Mercurio Antofagasta, 29 de julio 2014).
Las condiciones de vida son
eminentemente competitivas, tensionales, estresantes, agresivas y, la rutina
que arruina, nos exilia de nosotros mismos. Farmacias y clínicas por
doquier. El bienestar, no implica una
calidez humana de vida e inclusión. En el prolífico mundo
de la tecnología comunicacional se escucha: “Aquí falta comunicación”. Las
personas se clasifican y se definen por sus ingresos. La
4.-
mercantilización
de la vida agudizada de codicia, desplazó el sentido de la gratuidad. Si el
agua, nuestra madre de la naturaleza, pasa a ser un bien comercial, por ende
está en manos privadas, con mayor razón también la educación, la salud.
El
sentido ético del Bien Común se corroe de individualismos, e imperan las
desconfianzas. ¿Qué soledad es más solitaria que la esconfianza?. El bien común
de nuestra País se invisibiliza por el
absorbente centralismo de la megápolis santiaguina. Los precarios recursos de
bienes públicos en Provincias denuncian la falta de visión de País integrado.
Así
entonces la vida, vacía de humanización, pesa mucho. Una vida tan trajinada,
ajada ¿no opaca la dignidad humana?. ¡Somos seres humanos!, no un “recurso
humano” decía un grafiti en la calle. El pez fuera del agua, sobresalta hasta
morir, el ser humano, de la misma forma, fuera del océano de su espíritu. La
medicina sintergética nos dice que “la ciencia, sin sujeto, no tiene objeto”,
habría que agregar: una sociedad sin sujetos, de subjetividades es sólo un
enjambre.
Esta
apretadísima concatenación de hechos palmarios exigen preguntarse: ¿qué
corrientes valóricas nos trajeron a estos climas sociales?. ¿No son los
valores, que finalmente, concretan las
opciones humanas?. Entonces, ¿no serán los valores de una economía febril, que
invadió y alteró profundamente el alma social, su salud mental?.
La
Sra. Marta Lagos, Directora de Latinobarómetro, en su reciente investigación
sobre el estado social en chile, publicado en la Tercera, 2 de Nov.2013, entre
sus fundadas y preocupantes conclusiones nos refrenda: “Las instituciones de la
democracia están todas en
último
lugar. Aún más, sólo el 32% dice que la economía de mercado es
indispensable”.
El
transvasije valórico en Educación:
De
todo este panorama existencial, y, en mi ineludible conciencia de educador debo
aterrizar brevemente en el sistema educacional por dentro: Este sistema ha
provocado un daño muy profundo a los chilenos, a nuestra Patria. Nos ha
des-hermanado. Hay consenso del inclemente “apartheid educacional chileno”. La
educación, cuando es raptada por los fines de lucro, profana su
sagrada esencia ética: Despertar
conciencia,
la conciencia de saber, de conocer, de hacer,
de convivir. Las mallas curriculares con sus respectivas metodologías
han anquilosados los rendimientos potenciales de aprendizajes. Tenemos una
industria en función a estándares cognitivos para el mundo laboral. En los parámetros
de las pruebas siempre estamos por debajo de la media de los países de la OCDE.
La educación perdió su alma al verterse en un campo de instrucción. Su calidad es juzgada
por las atrofiantes mediciones: SIMCE,PSU,INICIA, instrumentos uniformes y
sesgados para las realidades tan desiguales. Al interior y al exterior de los
establecimientos reina también el smog del dogma de la competencia.
La enseñanza aprendizaje está preñada de contradicciones.
¿Puede haber algo más insólito,
contradictorio en educación, la carencia
de espacios de reflexión, de retro alimentación?. Pasar y pasar “materias”, la gestión
educativa aplomada de controles. Magna ingenuidad para garantizar calidad. La
educación como bien de consumo, consume la inteligencia, la
afectividad y el espíritu.
La
violación a los derechos humanos nos ha horrorizado, siento que no exagero por
tener el mismo sentimiento por lo que se ha hecho de la educación.
PERCEPCIONES EN
SIMBOLOS:
Las
percepciones presentadas las describimos en las siguientes situaciones y
símbolos:
De Vivir corriendo,
sobrecargados
A Ser personas más
dueñas de sí mismas.
De Hormigas
A
Personas.
De Pulpos
A Personas.
De Hipnotizados
A Personas.
De Estudiantes
Pasivos, Receptores
A Educandos
Protagonistas, Pensantes.
De Ser Islas con celulares
A Ser
Más Personas
De Llegar a los espacios siderales
A Llegar a los hijos,
a los vecinos.
De Una tierra ultrajada por ambiciones
A
Sembradores de vida.
Darnos
cuenta de estas realidades nos urge a buscar qué es lo que más nos pertenece,
cuál es nuestro habitat. La orfandad de valores
sustantivos que nos lleve hacia nuestros orígenes para renovar nuestro vivir
humano. Las fuentes siempre refrescan. Aprendamos de los salmones que ascienden
por corrientes adversas.
HACIA UNA CONCIENCIA DE VIDA HUMANA:
LOS DERECHOS Y DEBERES SE EXIGEN, NO SE MENDIGAN
¡Volvamos a la raíz!.
Entre las pulsaciones internas del existir humano de hoy se
vislumbran tendencias de reconocimiento que debemos ser más sujetos que objetos
como sociedad. En 2002 se organizó en la ciudad de México un Congreso Mundial
de Recursos Humanos el cual tuvo una asistencia de 4.000 personas. Su lema
convocante: “Regreso a la Persona, Las personas hacen la diferencia”. Sus expositores fueron de nivel
mundial durante cuatro días. En 2014 el Congreso se realizó en Santiago de
Chile y su lema convocante: “Volver al Origen”. Debe reconocerse también que la
inteligencia humana tiene sus propios despertares: Desde hace no pocos años
surgieron las normas
Calidad ISSOS para el mundo productivo que implican rigurosamente
normativas de perfección industrial, y, entre ellas el
garantizar una clima organizacional que dignifique tanto el
ambiente laboral como sus trabajadores. Pareciera suponer que de ello ha nacido
la filosofía “La Responsabilidad Social de las Empresas”. Son Paradigmas
emergentes que aún no se globalizan plenamente. No siempre la acreditaciones al
respecto se aplican verazmente en la realidad. Sin embargo estos destellos
insuflan esperanzas aunque el alud depredador del planeta avanza y avanza.
Algunos científicos que detectan y evidencian las profundas crisis
ecológicas, que el Papa Francisco en su Carta Encíclica: “Cuidemos nuestra Casa
Común” se expresa que es una crisis “ECOSOCIAL”, ellos diagnostican: “De no
revertir el sistema de vida que hemos generado, las catástrofes para este
siglo serán devastadoras para la humanidad”. ¿Habrá que emigrar a Marte…?,
¿empezar de nuevo, pero sin Caín?, ¿se
considera ya irreversible orientarnos hacia una sociedad más coherente a su naturaleza?.
Desde mi reflexión, nutrida desde varias interpretaciones,
considero que especialmente desde el
nacimiento de la era industrial los seres humanos nosconvencimos que somos
superpoderosos. El poder racional nos autodivinizó. Sólo los más capaces se
merecen vivir. El conocimiento es el Poder. Recordemos el dicho cartesiano:
“pienso, luego existo”. Su reverso, socialmente tal poder se identifica con el
dinero. Se le llama “capital”. Su etimología corresponde a la palabra Caput que
significa cabeza.
POR “EL CAMBIO DE PARADIGMA” O “EL CABLE A TIERRA:
Si los pensamientos son conductores del vivir humano, ¿cómo
revertir el paradigma entronizado del Poder como valor supremo y de dominio?.
La vida
es un tejido de relaciones, de transformaciones.
Fuimos
engendrados en un pleno abrazo de amor. Nacemos con el sol de la dignidad de
la
vida, de la filiación, de la fraternidad.
La
naturaleza en el reino animal impregnada de ternura: el sentido de maternidad,
de amamientos de la madre con sus cachorros, del cuidado por ellos. Los juegos
entre los cachorros y adultos.
¿No
es maternal que el sol te levante y en la noche la luna con sus estrellas te
invitan a descansar y soñar?. ¿Qué decir de la madre agua, de la madre tierra?
¿Existe
algo más real que la vida misma?.
Pero,
al corto andar nos absorbe el mundo de la competencia, quién es “más” que otro,
quién desplaza a quién. Sus afanes son excluyentes. Sin embargo, el mundo competitivo
para que no se le funda su motor, se reviste de variadas formas de
sociabilidad, de asistencialismos. Las empresas han concebido que se deben a
una responsabilidad social que cumplir. Paulatinamente algunas empresas avanzan
en mejorar sus relaciones humanas. Sin
embargo,
el febril mundo de los negocios comanda los climas organizacionales.
Se
aserta como incuestionable que “nuestra vida es así”, “es la ley de la vida”. Desde
los
afanes del poder se ramifica una sociedad segregada, más aún, polarizada.
Cuestionamos
que la vida “SEA ASÍ”:
Todo
depende desde qué paradigmas iniciaremos
nuestras cartas de navegación.
Nos
iniciamos desde el tejido de la vida, la vida recreándose en sus
complementaciones.
Nuestro
tronco parte desde el ser humano que nace y se desarrolla al abrigo de sus
padres, y todas sus facultades internas, su corporalidad son para comunicarse,
interrelacionarse. ¿Qué nos es más real:
las
pulsaciones íntimas para socializarnos, o, los sistemas creados donde “el
hombre es
lobo
para el hombre”, quién domina a quién?.
Vislumbramos
que del círculo vicioso que nos encierra la competencia podríamos generar el
círculo virtuoso “competencias entre equipos”. En todos los ámbitos se está
llamando a personas con capacidades de integrarse a equipos, de forjar equipos.
Desde
la física a la biología es la cohesión, la unión que hace la fuerza. La
pedagogía esencial es aprender a empatizar, dialogar, descubrir los valores
desde “un
legítimo
otro” como advierte el Dr. Maturana, Premio Nacional de Ciencias. La riqueza
infinita del aprendizaje la vemos en las raíces, se nutren de todo su alrededor,
y, por ello realizan las más maravillosas transformaciones que superan toda
fantasía.
En la Brújula de la Vida:
Ante una cultura de vida, sustentada en los estímulos externos
que atrofian las propias capacidades humanas:
Recordamos que la madre naturaleza nos enseña que la vida se
genera generosamente
y siempre desde dentro hacia fuera: se inspira y espira. Post estado
de Inconciencia se dice que “volvemos en Sí” cuando respiramos. La semilla
desaparece creciendo, el gusano que se oruga y renace en mariposa…. Es la vida
respondiéndose a sí misma. ¿No nos balbucea que debemos responder desde nuestro
propio corazón?. Existe una sapiencia propia de la naturaleza que, si de ella
extrajéramos sus leyes vitales para nuestro tejido social podríamos ser más colaboradores con la creación.
Las personas, hijas de la vida, desde el seno de la sensibilidad
de nuestras conciencias podremos reeducarnos, sumarnos
a la re-creación de la naturaleza. Hacer de nuestra libertad no
sólo la capacidad de
elegir cosas, que también se da en el fascinante reino animal, sino abrirnos, entregarnos a los desafíos de
la vida; de
amar y ser amados para ser partícipes del concierto social, de
nuestro universo.
Si reconocemos afectiva y efectivamente, que la vida “no es sólo
ese “bullicio” entre dos grandes silencios” como acotaba nuestra distinguida escritora Isabel Allende, y nos
recentramos en sus fuentes, podremos
retomar el camino de la vocación
de ser persona, de forjar una sociedad con rostro humano.
EPÍLOGO:
Compartimos esta visión en aras de cimentar el Desarrollo
Humano y de Nuestra Tierra. Civilizarnos
es cernir los valores que nos
humanizan y nos deshumanizan. Hay Cambios radicales de
costumbres sociales que parecen ahuyentar valores fundamentales a partir del respeto consigo mismo, con mis próximos, el
sentido de la responsabilidad, del sentido ético del bien común.
Una sociedad vertida a los estímulos externos, eclipsando
las conciencias desde los senos educativos a la convivencia civil, estará
socavando su propia sustentabilidad. Necesitamos crear simbiosis sociales para
encontrar lo que nos pertenece como
seres humanos. Se insta a ser innovadores en todos los campos, mas innovar que
las personas se eduquen para convivir, crear estrategias de acciones
involucrantes, requiere cambios profundos de paradigmas.
Se
pontifica que estamos en la era del poder del conocimiento por el desarrollo
científico - tecnológico. Miles de millones
de
dólares se invierten para descubrir qué hay o qué hubo detrás del Big Bang… .
Sin
embargo
el poder del conocimiento, hasta hoy es impotente para hacer de este planeta un
hogar de feliz estadía para todos los seres humanos. EL paradigma
epistemológico de la “Especialización” con sus lados claros de aciertos, pero
su absolutización, su atomización, cegó
la visión holística de la vida. Así la vida social no deja de ser casi esquizofrénica.
El
día Viernes 29 de Septiembre 2013, las Naciones Unidas dan a conocer un alarmante
informe: Asegura que es inequívoco el calentamiento global y que existe el 95%
de certeza que el hombre es su responsable. Nuestro País figura entre los
emisores del
CO2.
Este hecho que se denominó como la “Verdad Incómoda”, será una “Verdad Insoportable” para las
próximas generaciones. La denuncia de la ONU nos enfrenta a plantearnos a un
cambio profundo de vida. Un dicho aborigen australiano dice: “Todos estamos
aquí de visita en este momento y lugar. Sólo estamos de paso. Hemos venido a
observar, caminar, crecer, admirar, amar y volver a casa”. Y, pienso que tal
casa comienza en la casa de mi corazón, la de mis prójimos para estar en la
casa del corazón de Dios.
Junio
2012 – Septiembre 2013 –
Octubre 2015.
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